27 noviembre, 2021

Reseña: Tres chicos buenos de Pablo Wessling

Título: Tres chicos buenos
Autor: Pablo Wessling
Saga: No / Autoconclusivo
Editorial: Roca
Número de páginas: 176 
Fecha de publicación: 4 de marzo de 2021

Pablo Wessling (Barcelona, 1984) lanza su primera novela, Tres chicos buenos, un año después de la publicación del que fuera su estreno dentro del mundo editorial con el libro de ilustraciones Rita pinta con su tinta

Tristán, Guille y Luis son tres amigos que llevan posponiendo un viaje a Benidorm durante varios años, pero por fin se han animado a llevarlo a cabo. Sin embargo, mientras están en camino hacia su próximo destino, deciden tomar otro rumbo cuando se cruzan con Olegario, antiguo socio de negocios y amigo del padre de Tristán y que parece ser el responsable de que toda su familia se esté desmoronando poco a poco. Lo que empieza siendo como un viaje por carretera entre amigos terminará convirtiéndose en algo mucho más peligroso de lo que en un primer momento imaginaron.

En Tres chicos buenos nos encontramos ante una lectura rápida y ágil, no sólo gracias a su brevedad sino también por la manera en que está escrito (con una prosa de lo más fresca y cercana). Además, es uno de esos libros que te atrapa desde el comienzo, impidiéndote que lo sueltes hasta que no lo hayas terminado.

Ahora bien, hay algunos momentos en los que se pasa muy por encima de algún que otro detalle, no permitiendo que el argumento tenga un desarrollo algo más profundo y dejándonos algo fríos en según qué escenas, provocando en nosotros la sensación de que la historia no está perfilada al completo. Esto viene dado también por el ritmo de la novela, puesto que se nos narra todo de una manera de lo más acelerada, pasando de una cosa a la siguiente en apenas unas páginas.

Por otro lado, es de alabar el trabajo que ha hecho Pablo Wessling en la creación de la atmósfera que rodea toda esa trama, puesto que es muy fácil conectar no sólo con la historia sino también con los personajes. Esto es así hasta tal punto que son varias las escenas en las que una leve sonrisa te aparece en los labios de manera irremediable, sobre todo en cuanto a la relación que mantienen nuestros tres protagonistas, cuya amistad es un regalo para los lectores. El autor, además, ha conseguido que la unión entre ese viaje por carretera y el misterio que va tomando relevancia dentro de la historia poco a poco se complementen a la perfección, lo que hacen que su lectura sea toda una delicia.

De cualquier manera, la historia termina y, si bien es cierto que queda cerrado el argumento en ámbitos generales, son bastantes los cabos que quedan sueltos y sobre los que no llegas a saber nada, con lo que se trata de un final que te sabe a poco y sobre el que te quedas con ganas de descubrir más.

Ya hemos mencionado la relación de amistad de los personajes, con los que además es fácil empatizar. Ahora bien, a esto habría que añadirle el hecho de que son personajes de lo más entrañables: estamos ante un pequeño grupo de amigos de lo más dispares pero que te contagian su alegría, su pesar, su rabia... Son de éstos personajes con los que te gustaría cruzarte en el mundo real e, incluso, de los que te gustaría tener como amigos ya que sabes que con ellos la diversión estaría asegurada.

En conclusión, Tres chicos buenos es es una novela que termina sorprendiendo y cuya lectura es de lo más amena y adictiva. Totalmente recomendada para aquellas personas que tengan ganas de un libro que puedan devorar en tan sólo unas horas.

2 comentarios:

  1. ¡La portada es preciosa! Y si, encima, es un libro cortito, creo que puede ser justo lo que necesito para superar mi bloqueo lector.

    ¡Besos desde https://lacontraportadablog.blogspot.com/!

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  2. Primero que nada, gracias por tu reseña, realmente me ha gustado, por lo tanto me llevo el libro anotado, especialmente porque es cortito y en estos momentos no me queda tiempo para hacer casó nada, por lo tanto es perfecto para mi
    Besos!!1

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