03 junio, 2019

Reseña: El doble secreto de la familia Lessage de Sandrine Destombes

Título: El doble secreto de la familia Lessage
Título original: Les jumeaux de Piolenc
Saga: No / Volumen independiente
Editorial: Reservoir Books
Número de páginas: 336
Fecha de publicación: 4 de abril de 2019
Precio: 18,90€ (tapa blanda) / 9,99€ (ebook)
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Ficha completa AQUÍ

Sandrine Destombes (Paris, 1971) se ha convertido en una de las autoras francesas de mayor prestigio de los últimos años tras la publicación de su primera novela en el año 2014, a la que siguieron otras cinco más. Sin embargo, el mayor reconocimiento le ha llegado de la mano de El doble secreto de la familia Lessage, que consiguió alzarse victoriosa con el Premio VSD RTL al mejor thriller francés del año gracias al cariño del público, pues los autores optantes al galardón se encargaban de ir subiendo su novela capítulo a capítulo y solo las más votadas pasaban a la siguiente ronda para poder desvelar, así, cómo continúa la historia. Es, además, la primera novela que llega a las librerías españolas. 

En la población francesa de Piolenc, empiezan a desaparecer los alumnos del colegio La Ròca en un caso muy parecido al que aconteció hace 30 años en torno a los hermanos Solène y Raphäel Lessage, que todavía se encuentra sin resolver. El capitán Fabregas será el encargado de llevar adelante la investigación con la ayuda del ya retirado Jean Wimez, que le puede aportar todo su conocimiento sobre la búsqueda de los Lessage. ¿Conseguirán entre ambos salvar a los recientemente desaparecidos?

A través de una serie de brevísimos capítulos, Sandrine Destombes nos presenta esta historia que nos mantendrá en tensión desde la primera página hasta la última, destacando sobre todo por la gran agilidad y rapidez que aporta esta estructuración a su lectura, dejándonos siempre con la miel en la boca en el último momento para conseguir un nivel de adicción insuperable. 

Sin embargo, llega un momento en el que la historia se vuelve un poco árida, puesto que, si bien es cierto que la acción va avanzando, solo lo hace para enredar mucho más lo que se va sabiendo del caso y son muy pocos los detalles que realmente interesan. A ello habría que añadirle que, de los que realmente son importantes para la trama, en muchas ocasiones carecen de sentido ya que se nos presentan de la "nada", sin guardar relación alguna con lo que se nos ha ido contando con anterioridad.
-Pero, ¿en qué mundo vivimos, Jean? 
-En un mundo que intenta que crezcan demasiado deprisa.
Ahora bien, es de alabar la capacidad que tiene Sandrine Destombes para provocar ciertos sentimientos en el lector, dado que, gracias a la ambientación de la que dota a su novela, produce la sensación de estar viviendo una historia un tanto enferma y que te causa un gran malestar incluso después de haber terminado de leerla. También es digna de aplauso toda la investigación de temas psicológicos que ha llevado a cabo nuestra autora, descubriendo para todo aquel que se adentre en sus letras una nueva manera de ver la infancia en la época en la que nos encontramos.

Ya se ha mencionado que llega un punto en el que la historia se hace un tanto monótona, dándose la percepción de que se intenta alargar la llegada del final todo lo posible. No obstante, una vez superada esa fase se resuelve todo de una forma quizá demasiado urgente, pese a que es de lo mejor que se puede encontrar en la obra: la autora cierra a la perfección toda la trama con una idea tan original que no hay manera de verla venir en ningún momento.

Los personajes, por su parte, no terminan de brillar, teniendo en cuenta que no están del todo bien definidos y les falta profundidad. No hay manera posible de conectar con ellos salvo en algunos casos y situaciones muy concretos, ya que están demasiado manidos y no salen de un estereotipo que no deja de repetirse en este tipo de historias. El único caso que se salva es el de la doctora Florent, que es como una brisa de aire fresco y hace que, por momentos, el lector se olvide de los descuidos que rodean a los demás personajes. 

En conclusión, El doble secreto de la familia Lessage es un thriller adictivo y original en muchos sentidos, pero que se vuelve un tanto uniforme en más de un aspecto que hacen que su calidad se vea rebajada.