Church estaba allí otra vez, como Louis Creed temía y deseaba. Porque su hijita Ellie le había encomendado que cuidara del gato, y Church había muerto atropellado. Louis lo había comprobado: el gato estaba muerto, incluso lo había enterrado más allá del cementerio de animales. Sin embargo, Chruch había regresado, y sus ojos eran más crueles y perversos que antes. Pero volvía a estar allí y Ellie no lo lamentaría. Louis Creed sí lo lamentaría. Porque más allá del cementerio de animales, más allá de la valla de troncos que nadie se atrevía a traspasar, más allá de los cuarenta y cinco escalones, el maligno poder del antiguo cementerio indio le reclamaba con macabra avidez...
Cementerio de animales, la decimocuarta novela de Stephen King, contó con un éxito insospechado incluso para el propio autor en el momento de su publicación en el año 83 e, incluso más de 35 años después de su publicación, su historia sigue dando de qué hablar, habiendo sido llevada al cine en dos ocasiones (la primera, en 1989, de la que también hay una secuela en 1992, y la segunda, mucho más reciente, en 2019).
Así pues, desde el principio de su novela, el autor ha creado una atmósfera que te mete de lleno en su historia, logrando el punto exacto de intriga, misterio y terror como para engancharte totalmente. Hacía mucho tiempo que ningún libro me atrapaba de tal manera que pudiera centrarme en él durante varias horas sin siquiera darme cuenta del tiempo: las páginas que conforman la novela pasaban ante mis ojos con una rapidez increíble, sin llegar a cansarme o a hacerse pesada en ningún momento.
Se trata de una novela que te sorprende en más de una ocasión, impactándote con lo que está sucediendo ante nuestros propios ojos y dejándote con ganas de más después de un final que no se puede definir de una manera que no sea espléndido. Que te deje con el corazón en un puño es algo frecuente dentro de la novela, sobre todo después de la segunda mitad del libro, que comienza de una manera magistral y presenta un giro en el argumento ante el que es inevitable no quedar totalmente estupefacto.
En definitiva, nos encontramos ante una lectura fascinante y que hará las delicias de cualquier lector. Stephen King ha construido una obra maestra con Cementerio de animales y, desde luego, no sorprende el éxito que se ha labrado a lo largo de los años, consagrando a su autor como uno de los favoritos del género entre tantos lectores de todo el mundo.
Cuando me terminé este libro, lo cerré... Y volví a empezar a leerlo de nuevo. Es un libro duro, no solo por el terror que emana, pero no podía soltarlo. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarYo tengo pendiente todo lo que sea de este autor porque soy una persona tan miedosa que con cualquier cosa me asusto, una sola vez he visto la pelicula que hicieron de este libro (la primera, porque la nueva que hicieron no me he atrevido a mirarla) y quede traumada, claro que era algo mas pequeña en ese entonces pero soy muy credula y a veces en realidad siento que las cosas que pasan en los libros y peliculas de terron pueden suceder y me traumo jajajaj
ResponderEliminartal vez algun dia me armo de valor y lo leo pero poe ahora lo dejo pasar
Gracias por la recomendacion
Nos leemos
besos!!